Recapitulando mis navidades pasadas.

Y es que siempre se me hace complicado iniciar las primeras palabras de mis chascarros y anécdotas en particular de una fecha tan festiva y sensitiva tan delicada diria yo, aquella que ha sido capturada por el tentáculo de la enorme publicidad capitalista y comercial de los últimos años, y peor aún cuando muchos se llenan la boca hablando de reflexión y otras tantas cosas que nada cambia el tema y la celebración exacta de éste significativo evento cristiano, que para muchos significa gastar bastante y para otros tantos llenarse los bolsillos gracias a éstos muchos e incautos parte ya de la propaganga arroladora de los medios de comunicación, pero para muy pocos resulta elevar a la máxima expresión el real significado que en la religión crisiana es la llegada de Jesucristo al mundo.

Para que negarlo, siempre estamos afectos a la tentación de la lujuria, de la prosperidad rápida, de aquella felicidad mediata, de propinas y glotonería, de juguetes y ropa de moda para los más pequeños entre otras cosas que de seguro no vienen al tema pero no dejaremos de tocar, pero he aqui el recordaris de quizás las navidades que nunca olvidaré.

Recuerdo aún la lejana Navidad del 79, cuando apenas tenía 4 años rumbo a los 5, aquella que trastocó el almacenamiento entre mis recuerdos con el inicio de la compra del primer televisor de la familia, una que se componía de mueble entero y unos parlantes incrustrados a cada lado con patas para el piso, claro todo una moda en electrodomésticos y artefactos eléctricos para el hogar ese año, y como olvidar el fiestón que se armó la nochebuena, celebrando el acontecimiento en sí y el de la adqusición doméstica del televisor, de la una de las últimas noches junto a aquel tocadisco de sonido estereo de doble canal, del cargador automático de discos de vinilo y aquella ceremoniosa y brusca amanecida de amigos, familiares y vecinos de la casa, que de seguro muchos no recordarán, pero a mi me quedo impreganado por tales acontecimiento y la bendita noche que me pase en vela por la descomunal bulla que se armó y no me dejo pegar los ojos un poco, de la tv y el tocadiscos solo puedo decir que hoy queda como reliquias históricas de la familia.

Los navidades venideras de los siguientes años no quedaron plasmados en mis recuerdos quizás por la misma situación social y conflictiva de aquellos tiempos, pero si recuerdo aquella del 84, como una de las tristes y desoladas de mi niñez; recuerdo cláramente que aún se construía nuestra primera casa y la marcha abrupta y desconocida hasta entonces para mi por parte de una de las personas mas cercanas a mi, ya sea por mi afinidad familiar, como gran maestro en la autodidáctica o bien como todo un personaje por la cosas que hacía, quizás el hecho de no tenerlo nunca más por su posterior partida al más allá marco los siguientes siete navidades que pasaron desapercibidas mas que por reuniones familiares intrascendentes y dormilonas, un especial recuerdo a Walter más que un tio todo un creador e inspirador de talentos.

Si hay que destacar una Navidad donde más que familiar me unió a otra gran familia y que hasta ahora añoro seguramente fue el de los medios de comunicación, aquel año un grupo de jóvenes liderado por nuestro siempre amigo Hugo Sosa Santiago, y ya trascendentes César Cosme, Oscar Silvestre y Daniel Arroyo, seguidos por jovenes que no traspasaban los 18 o 19 años de edad, tales como Flor de María Llantoy, César Alcántara, Herbert Cosme, Clever Arzapalo, Edith Janampa, Eliceo Terrazos, y por su puesto mi persona, habíamos destacado con el Noticiario Stereo noticias por Radio Stereo B en la frecuencia modulada en sus inicios en el Cerro de Pasco, y que finiquitando nuestra labor radial aquel año, encabezados por Flor de María, y César Cosme se logro colectar entre los más entusiastas comerciantes de Huamachuco y P.C. y Lira juguetes, ropas, víveres, y todo aquello que sirviera para poder obsequiarlos a lo que más lo necesitaban y aquello marco realmente ese concepto, ya que luego de una pequeña reunión decidimos hacer algo más trascendente y no comercial, sin publicidad y más que con el esfuerzo común de todos quienes conformabamos éste grupo regalarles un día de nuestra vida y llevarles los pequeños presentes y no canastas sino bolsas navideñas que erán más prácticos de transportalosal hombro o jalarlos al brazo para transcurrir las más desoladas periferias de nuestra localidad, allá donde las autoridades no llegaban por lo agreste del camino; o porque las unidades moviles de las personalidades benéficas y altruistas del Cerro de Pasco no rodaban sobre sus cuatro ruedas hasta esas alturas, nos pusimos manos a la obra temprano, muy temprano ese 24 de diciembre del 91 abrimos los fardos que contenían víveres de primera necesidad los compartimos, escogimos los mejores juguetes seleccionardos y reembolsados, si más que mas salimos sin previa presentación radial ya que queriamos llegar a lo más recóndito, a donde la Navidad llegaba con real efecto en calidad y voras olvido, estremeciendo aquellos hogares pobres, dejando huellas de miseria y dolor. Allí nos proyectamos y por supuesto llegamos, dividido en dos grupos partimos de nuestro local radial querer pasar desapercibidos quizás era una tarea imposible ya que la época presentaba un lleno total las arterias circundantes a la plaza Carrión y San cristóbal, por ello tuvimos que doblegar esfuerzos para huir de aquellos que de seguro presentían que como representantes de un medio de comunicación teníamos algo entre manos, pero el objetivo era llegar mucho más allá, iniciamos nuestra labor por el pueblo joven Uliachín allá donde los cerros circundan la ciudad las partes altas de casas muy labradas por el tiempo de ventanas sin el correspondiente traslucir de los cristales más que por agujeros del tiempo atravezando viejos retazos de plásticos que servían para no dejar pasar el viento; de puertas de candados colgando más que seguridad residencial servían solo para cobijar algunas pertencias para sobrevivir y cobijar el sueño agotador de personas que a esa hora laboraban incasablemente en algún lugar de la ciudad, todo ese panorama se hizo largo y penoso y no por el trajín del sendero o lo trabajoso que costaba llevar nuestras prominentes cargas que más tarde resultaría insignificante, sino porque la vista era patética y muchas veces enternecedora, de niños dejados al cuidado del hogar vistiendo harapos, protegiendo sus piececitos con deslucidos zapatos de jebe o botitas para el agua que en éstas alturas altoandinas te congela como si una bayoneta te atravesara, de esas caritas labradas por la brisa seca, el viento helado pero siempre alegres como mostrándose inmune a la indiferencia y al olvido; de ancianos que a la terca mirada de la ingraitud y el desdén del sistema se regocijaban bajo la única luz que traía el día bajo aquellas puertas oscuras que también eran su hogar.

De cuando en cuando nos atisbavan con recelo y estupor, con aquella curiosidad preguntándose seguramente que hacían desconocidos por aquellos lares, optamos muchas veces por dejar bajo aquellos techos esperanzadores nuestras significativas bolsas navideñas con el siempre respectivo anonimato, de todos modos no se trataba de publicitarnos con aquellos coterránenos sino llevarles algo de esperanza, compartir lo que se había reunido gracias a la colaboración de comerciantes y amigos, de desprendernos de lo que podíamos haber llevado a casa aprovechando el momento; pero no; lo acordamos y todos estuvimos de acuerdo y así se hizo.

Pocas veces como aquella ocasión nos entregamos por completo, sin pedir la movilidad para la comisión del día o el refrigerio respectivo, terminamos cansados y mojados por la persitente lluvia luego del medio día, algo quedaba claro todos quedamos exhaustos pero aun teníamos fuerzas para continuar, regodeamos media ciudad por su contorno, y aún teníamos fuerzas, nadie solto palabra alguna luego de la jornada; llegamos a la sala de espera de la radio y sentados todos nos mirabamos y aquellas miradas reflejaban una intensa radiación de satisfacción de alivio de compromiso cumplido.

No se si todos, pero si hay algo que aprendí ese día fue entregar, dar desprenderse de lo poco y entregarlo a quienes más lo necesitan, llevarles esperanza donde no la hay, quizas demostrarles de que como en aquella ocasión muchos solo trabajaban para el día, para sobrevivir y les llevamos con nuestro compromiso un poco de amor, si aun lo recuerdo luego de dieciocho años aprendi Abrigar la Esperanzas en aquel recondito circundante marginal que aun hasta existe y miro al transcurrir por mi ciudad; un panorama que se repite por todo el Perú y el mundo.

Quizás esa sea la única de todas la navidades que sea digna de rememorar, ya que los sucesivos al igual que toda la maraña comercial estuve en casa con pavo, panetón, chocolate, intercambio de regalos y tantas gollerias que se enquisto mudamente en la familia. No se ustedes pero yo decidi aquel entonces desterrar la comercialización de ésta fecha y hasta hoy en día llevo luchando con mi familia y parte de ésta sociedad por es aidea; pero se hace difícil pelear con el mundo.

Feliz Navidad mundo entero,

P.D.
Recordando y saludando a mis eternos amigos desde aquel entonces, Huguito Sosa siempre preocupado por la sociedad y el medio ambiente de nuestra región, a Flor de María Llantoy "Lizy Montero" eterna difusora del cantar andino contemporaneo; a Clever Arzapalo gran amigo y comunicador social, a Daniel Arroyo, César Alcántara, Edith Janampa, Eliceo Terrazos, Oscar Silvestre, César Cosme; docentes forjadores de nuestra educación a nivel regional y nacional.

Pishtacos Dilema y Curiosidad

Cuando enfatizamos nuestra opinión y referencia hace medio año atrás con respecto a los Pishtacos o Naqak, no deseabamos crear una alarma ni menos acudir a un espectáculo supuestamente montado por la policia o para redimirnos y pensar que éstos se llevaron un fiasco, si bien es cierto que el término usado por la Policía Nacional de  Perú para muchos pobladores, autoridades locales y gobernantes el término suene alarmante, pues ésta no debe ser novedosa ni menos escandalosa, ya que hasta donde podemos notar directamente o indirectamente se hizo uso de un término correcto tal como referíamos en nuestro post  Pishtacos Leyenda urbana o un mito serrano,  se define a éste como personas que roban, asaltan a personas solitarias para extraerles la grasa, u órganos  con posterior muerte, o darle otro uso que posteriormente explicaremos. Ahora bien si alguna diferencia hay entre la terminologia y las historias que alguna vez nos han contado nuestros antepasados relatandonos que lospishtacos eran hombres altos, de pelo rubio, barbones ojos verdes o azules que vestián con abrigos largos, bajo un eterno sombrero alargado, nos equivocamos pues el termino sigue definiendo los mismo, no dice necesariamente que éstos tengan que ser extranjeros o guardar ciertas características con lo especulado y la fantasia, es decir y en pocas palabras los pishtacos vienen a ser asesinos, personas que matan o estan acostumbradas a hacerlos con alguna finalidad, y cuando hablamos de finalidad nos referimos que no solamente se mata por usar la grasa humana, pudiendo ser el tráfico de órganos, ojos, médula espinal, higado, riñón, corazon, etc, o bien simplemente por cuestión de misticismo o de rituales humanos, y cuando hablamos de estos rituales nos referimos exactamente a la creencia que en muchos lugares del Perú y sobre todo en la cultura andino amazónica los rituales desde épocas antiguas (pre inca e inca) eran habituales o practicados en muchos casos comprobados en las culturas andinas.

Cuando dejabamos pendiente una explicación posterior nos referiamos especificamente al uso o finalidad que se daban  a los cuerpos en sí, estas pueden variar de acuerdo a lo convenido o fin, pues no es raro haber escuchado u oido por parte de algún familiar o vecino cercano alguna vez, que en los escampados solitarios aparecían cadáveres mutilados, éstos pudieran haber sido relativamente para algún órgano específico, o de la desaparición sistemática de personas en distintos lugares pero en un mismo ámbito geográfico, siempre con la rara coincidencia de que muy cerca se llevaba a cabo alguna construcción de magnitudes, es vox populi pero a tientas que en los trabajos mineros, grandes estructuras, edificios o puentes, se acostumbra enterrar sobre las bases de éstos a personas vivas, si bien esto puede sonar macabro muy jalado de los pelos, y ateniéndonos a otras perspectivas seguramente nos juzgaran como querer jugar con la imaginación de la gente; y no es raro, ya que en la costumbre andina del tributo a la "pachamama" o "madre tierra" es muy común, esto puede ser considerado para muchos descabellado, pero a tientas y sobre una costumbre tan arraigada muchas personas aún acostumbran hacer éste pago, utilizando para ese fin animales menores ovejas, conejos, perros, cabritos, entre otros y cuando el pago es el tributo es por algo mas grande se han ofrecido y se presume que hasta hoy se ofrecen sacrificios humanos. Por ejemplo no es extraño hablar entre conversaciones muy precavidas a los mineros de la sierra central norte y sur del país sacrificios humanos que realizan las propias mineras, sí señores; gente que vive al ritmo del siglo XXI, pero esto será tema de otro día.

Fantasía o realidad los Pishtacos han estado presente siempre en la cultura andina y peruana.

Pishtacos toda una realidad

Lejos de lo que muchos pensaban y en razón de lo que tratábamos de articular en un post anterior, de seguro que la noticia que circulo por los medios de comunicación el día de hoy desbarata todas nuestros razonamientos y en favor de lo que refería uno de los comentaristas de mencionado post, y es que si a mí me refirío iniciar ésto como una anécdota de la preocuáción de la mayor de mis hijas biológicas, hoy es toda una realidad y es cómo por los medios de comunicación de todo el país anunciaban de la captura de cuatro integrantes a quienes se les acusa directamente de la desaparición de 60 personas en los departamentos de Huánuco y Pasco, y a mí aún no me abandona el pánico de pensar que si éstos no eran los que actuaban en el departamento de Junín exactamente por el Valle de Chanchamayo cerca a donde vive mi hija, tengo muchas mas razones por qué preocuparme ya que si grupos organizados o como la policía prefiere llamarlos banda en este caso "Pishtacos" no dista mucho de la definición moderna y ancestral que se tiene de éstos, el cual es aprovechar los órganos humanos en agravío de un ser humano. y por así decirlo aquí hago un copy del comentario que dejara un visitante anónimo a éste mismo blog, exactamente el mismo día horas antes de que se diera ésta noticia:

"mira que yo estuve por la sierra de Lima en año 2000, suena lejos pero la verdad es que fue poco antes de salir del pais, trabaje como guia de turismo, estudiando en un instatuto de Huancayo. la verdad es que no tengo buena memoria asiq ue no me acuerdo el pueblo pero puedo averiguar si te hace falta. el caso es que estando alli un niño se nos acerco a mi y a la canadiense que vino conmigo y con otros dos compañeros que seguian el camino hasta Lima por el camino Inca que une junin con lima; el muchacho de unos 11 o 12 años se nos acerco y nos comento que el habia visto pishtacos unos meses antes por la montaña, pero que esta vez iban en furgonetas negras, el vio cuando abrieron las puertas de la furgoneta y en su interior vio brazos y piernas colgando".


yo aun no me creo del todo, pero entonces me pregunto y si fuese verdad?, mi hermano me dice que es posible, ya que en la actualidad seria posible gracias al trafico de organos... los misterios de los andes son...

De seguro que nuestro amigo comentarista al escuchar la noticia que dará la vuelta al mundo se creerá lo que en su momento le comentaron aquellos adolescentes, ya que en definitiva no sería raro que sea el único grupo que haya estado actuando en el país, pues según las informaciones estos delincuentes se favorecen del tráfico de órganos, grasa humana, entre otros los cuales en el mercado negro se valorizan en altos montos. Razones suficientes para andar preocupado de la seguridad de mi pequeña y no andar escudriñando artículos y definiciones.

Enlaces que contienen esta noticia:

El derecho a ser padres

Ninguna clase retórica te prepara profesionalmente para esto, sin duda es una asignatura que debería excomulgar frente a toda preparación coherente en nuestras vidas, pero más allá de eso nos encontramos en el sinuoso vacío de siempre, pensar de que la vida te preparará para ello.

¿Todo el mundo tiene derecho a ser padre? con el solo echo de pensar tantas cosas se te hace mundo diferente desde la responsabilidad que acude ésto hasta un alboroto encomiable de la sociedad punible, anacrónica en buenos casos retórica y perniciosa ante estas situaciones.

Lo de Órgiva únicamente es una gota en un océano lleno de inquietudes. Ni el nivel económico ni las comodidades aseguran el desarrollo personal de un ser en sus primeros años de vida. ¿Planteamiento antidemocrático? Creo que en cierto modo el "nosotras parimos, nosotras decidimos" es igual de peligroso.

La opción de la religión, la tendencia sexual o la forma de vestir puede cambiarse a lo largo de nuestra formación personal. Puedes borrarte de la fe cristiana como del Círculo de Lectores, aunque los primero es un poco más difícil. Sin embargo, no tomar una determinada vacuna al iniciar tu trayectoria vital o simplemente carecer de una serie de alimentos por ideología paterna me parece algo más que una memez. Es una memez peligrosa.

Tirar la primera piedra siempre es arriesgado y ya a estas horas cuando empíricamente criaba a la mayor de mi hija vino uno más al mundo llámese irresponsabilidad o rapidez o llenar un vació, pero el hecho es que ante estas situaciones lo único que queda es actuar y remembrar las cuestiones antes lúdicas hoy míseras, volviendo al tema; no sé de que manera alienaré a mi hijo. Todos lo hacen de una manera u otra; comprándole una camiseta de un club de fútbol, apuntándolo a actividades extra escolares que quizás no le interesan... Por eso la dejadez y el maltrato físico no son las únicas herramientas para empezar a cargarse la vida de un ser humano desde sus inicios.

Los niños son seres racionales que se mueven más allá del capricho y el placer instantáneo. Si no nos damos cuenta de este factor, mejor que nos compremos un pez para hacer prácticas. Los perros son más inteligentes que muchos humanos. Al menos tienen instinto. Y es un aserción que a decir de diablo me lo dijo mi padre, quizás por los años que tiene, o tal vez porque es omnisapiente de la verdad humana aunque yo creo que es deidad de los que le supieron encomiar sus experiencias.

Más allá de todo lo único recíproco de la vida es dar el todo por el todo o el todo parcialmente haciéndonos creer que entregamos vida y alma a quienes trajimos al mundo, verdad o falacia mi situación al respecto me hace seguir el instinto antes que la razón, aquel instinto de supervivencia que de bohemias confusiones rescato la cual es de la protección y amparo a quienes serán quizás la compañía aunque no cercana pero espiritual de mis ultimas horas.
Preparados o no esta situación s de todos los días mal o bien emprendemos este hermoso, ardua y complicada tarea no por presión, sino por que es parte de nuestras vidas seguir ese instinto natural que va mas allá de la razón.

Mapa Antiguo del Cerro de Pasco

blogeando hace poco me toque con un plano topográfico antiguo de la ciudad del Cerro de Pasco, y como no se notaba tanto por la opacidad que produce el color negro lo invertí así que ahí tenemos el Plano.

del blog:

http://sincerrodepasco.blogspot.com/2009/05/mapa-antiguo-buenazo.html